Decreto del Destino

"Pues si los verdaderos enamorados han padecido siempre contrariedades, será por decreto del Destino. Aprendamos, entonces, a sobrellevar ese inconveniente con paciencia, ya que es una cruz habitual, tan propia del amor como los ensimismamientos, las ilusiones, los suspiros, los deseos y las lágrimas, triste acompañamiento de la fantasía." (Hermia, El sueño de una noche de verano)
Comparte: