Se les iba de las manos

“Si me hubiera acordado de cuando era mucho más niño, la historia de Santa Claus podría haberme dado una pista. Pero lo cierto es que no me había causado tanto impacto como para suscitar la posibilidad de que uno debiera dudar de la veracidad de las historias que no encajan en la naturaleza. Al descubrir que Santa Claus no era real no me disgusté; por el contrario, supuso un alivio saber que la explicación del fenómeno de que tantos niños de todo el mundo recibieran regalos la misma noche era mucho más sencilla. El cuento se estaba haciendo francamente complicado, se les estaba yendo de las manos.” (Richard Feynman)
Comparte: