...y después bajar
“Dicen los psiquiatras que nosotros los alpinistas, y más concretamente los himalayistas, sufrimos un síndrome que incluso tiene su nombre científico, el Complejo de Peter Pan. Nuestro irremediable mal nos hace regresar siempre a los mismos sitios, buscando esa eterna juventud a través de aventuras extremas y, a ojos de los demás, inútiles. Los que supuestamente padecemos semejante desfase siempre estamos haciendo cosas propias de lunáticos, como pilotar aviones o escalar montañas. Además según ellos, siempre nos caracteriza el ser soñadores y huidizos, escapando constantemente de eso que ellos mismos definen como realidad. ¿Qué quieren que les diga? Yo soy feliz aquí, en mi tierra de Nunca Jamás, y si se deja o descuida por un instante lo único que quiero es subirme al Annapurna, y después bajar.” (Iñaki Ochoa de Olza)