El valor

“La verdad es ésta: un demandante muerto rara vez es más valioso que un demandante vivo gravemente lisiado. Pero si la muerte es lenta y agónica, al contrario que la muerte en un accidente, el valor puede aumentar de forma considerable.

Por lo general, un adulto muerto de veintitantos años vale menos que uno de mediana edad. Una mujer muerta menos que un hombre muerto. Un soltero adulto menos que uno casado. Un negro menos que un blanco. Un pobre menos que un rico.

La victima perfecta es un hombre blanco, profesional de 40 años con gran capacidad de ganar dinero, segado en la flor de la vida. Y la más imperfecta… según los baremos del derecho de daños personales un niño fallecido es lo que vale menos.”


(Jan Schlichtmann interpretado por John Travolta en «Acción Civil»)
Comparte: